martes, 15 de septiembre de 2009

La guerra de Alkon: capitulo 14: El hombre de negro

Capítulo 14: El hombre de negro

Rotin observaba la pelea con interés pero cuando la balanza se inclino un segundo hacia el lado de número cinco se le encogió en corazón. Cuando este atacó sucedieron tres cosas simultáneas. La primera fue que el cielo se tornó rojo, la segunda que Stella chilló por la cercana muerte del chico al que había cogido mucho cariño y la tercera que una sombra se interpuso golpeando con los puños a las copias derrotándolas, atravesando al número cinco con su lengua y haciendo a la vez un campo de energía que evitó que las espadas cayeran.
Malherido el número cinco huyó hacia el bosque, Stella corrió a cortarle la retirada pero el hombre de la capa negra lo evitó asegurándole que él iba a morir.
Cuando despertó Raki comieron en torno a una hoguera.
-Vale- dijo la sombra- no os puedo decir mi nombre, estoy aquí para encomendaros una misión.
-¿Cuál?- pregunto Rotin.
-La de salvar al mundo. Yo he vivido mucho tiempo en el oráculo y hace dieciocho años se le dio poder a un bebé de la aldea colindante al templo. Ese niño eras tú, Raki. Tu destino está sellado desde antes de que nacieras. Dicen que siete demonios y siete ángeles volverán a Alkon a librar una guerra que arrasará el mundo solo siete guerreros que empuñen las siete armas y vistan las siete armaduras forjadas por Los Antiguos en la anterior guerra podrán restablecer el orden, o sembrar el caos eterno. Esto ya ha empezado y yo tengo un regalo que haceros.
Se acercó a Raki y sacó del interior de su túnica unos guantes de oro con remaches y pinchos por doquier, el chico pregunto que qué era eso, a lo que el hombre respondió:
-Es una de las armas legendarias, son unos guantes de oro con pinchos de adostín, el material más duro que existe, multiplica tu fuerza varias veces, podrás destruir casi cualquier cosa.
Se acercó luego a Rotin y saco dos puñales de tamaño desproporcionado
-Arin y akin, luz y oscuridad, respectivamente, según el idioma divino.
-¿Yo tengo dos armas?- preguntó Rotin mientras la soberbia embriagaba su cuerpo.
-En absoluto- respondió el hombre de negro con un atisbo de orgullo al bajarle los humos al ex-número uno- esos cuchillos poco valor tienen por separado, pero si los juntas se convierten en una doble espada.
Las unió y apareció una espada de doble filo con la empuñadura en medio. La hoja era curva y con una franja en el filo para que la sangre se escurriera y entrara aire en la herida, en definitiva, para matar más rápidamente.
-Y por último, aunque no por ello menos importante- dijo mientras se acercaba a Stella- para ti no tengo ninguna de las armas legendarias, pero tengo un regalo igual de importante, te voy a regalar la clarividencia.
La duda hizo presencia en el rostro de Stella mientras, el hombre, se iba acercando. Este cogió la cara de la chica entre sus manos y la besó en la frente. Repentinamente todo se volvió oscuro en la mente de la joven y se sumió en un profundo sueño.


Y con esto y un bizcocho hasta el dia 18 o así.

¿A qué se referirá el hombre de negro con la "clarividencia"? Y más importante aún ¿Quién es el hombre de negro?

escuchando: the wind beneath my wings (Sonata Arctica: cover de Bette Middler)

1 comentario:

  1. Bueno, ya empezaba a pensar que al pobre Raki se le iban a acabar las pilas...Qué descubrimiento...Por cierto: me sorprende gratamente comprobar cómo ha mejorado esa acentuación y esa puntuación. Hasta prontísimo!

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